lunes, 23 de abril de 2007

El otro día cené en un restaurante de lujo ...



... y me arrepiento. ¡¡ vaya si me arrepiento !!

La acción conjunta de:

a) que paga la entidad financiera a la que presto mis servicios.

b) que la bella población marinera donde me encontraba carecía de servicios básicos, véase Burger King.

han hecho que me decante por probar el restaurante del hotel, de esos calificados de lujo.

Debí sospechar que no era el lugar que me corresponde, cuando al entrar pude escuchar en el hilo musical el Triplekonzert de Beethoven en versión música de ascensor, subgénero "sala de espera del dentista". Vamos, que no era la sinfónica de Cleveland sino más bien algo a medio camino entre Xavier Cugat y La Década Prodigiosa ... pero ya estaba dentro.

Un tipo de sonrisa de anuncio me dice "si al señor no le disgusta, le hemos preparado un aperitivo. Ibérico sobre virutas de albaricoque y crema de queso Idiazábal". Tócate las narices. Hago yo eso en mi casa y me dicen que soy un guarro. Pero aquí .... bueno ¡encima me pregunta que qué me parece !! Pues que voy a decir ... "exquisito", "impresionante", "delicioso". Porque un ¡joder, está que te cagas! no hubiera quedado bien.

A la pregunta ¿qué desea el señor beber? respondo con un lacónico "agua con gas". Yo esperaba un Vichy Catalán, de toda la vida. Pues no, aparece el "somelier" (porque este no era camarero, os lo digo yo) y me trae una botellita que parecía un frasco de Calvin Klein, o de Kevin Cline o como se diga y me dice: es un agua noruega tomada directamente de un glaciar. Vamos, que le faltó decirme: y el gas se la introduce personalmente un bisnieto de Henrik Ibsen (homenaje a Colette y Lol v Steiner, besis…)

Me traen el pan. Bueno, una bella señorita aparece con una cesta con incontables variedades de pan. No sabía que el pan daba para tanto. Opto por la versión: demedosdeesasconcosasmarronesincrustadas. ¿pasas? ¿son pasas? ¿y cómo han llegado allí? ¿le sobra tiempo al bisnieto de Ibsen?

Examino la carta. No entiendo ninguno de los primeros. Directamente es que no los entiendo. ¿qué es el vinagre balsámico? ¿algo para el catarro? En fin, me acuerdo de mi madre "Fidelín, hijo, come pescado" y dirijo la mirada a la parte de la carta. Craso error: la nada compleja conexión neuronal que me caracteriza está solo preparada para el entendimiento de platos simples; el pescado + la forma de prepararlo: emperador + a la plancha, rape + al horno, jurelillos + en almíbar .... pero claro ¿Lubina confitada sobre un lecho de espinacas? ¿alguien le preguntó a la lubina si quería dormir ahí? En cualquier caso quiero vendetta por el impacto del agua noruega, así que enarco una ceja en el más puro estilo James Bond (cuando le decía a Bárbara Bach en La espía que me amó aquello de "espérame con todo caliente menos el champagne), y digo: creo que tomaré la lubina. Ojo al dato: “creo que tomaré”, que es como muy chic.

Las cosas como son: la lubina ... bueno, ¡¡ qué presentación !! Según le incidía la luz desde cierto ángulo me recordaba a Irene Jacob en Rojo. ¡qué preciosidad de pez, por Dios!. Y esa frutita pequeña y naranja con hojas verde grandes en la esquina del plato estudiadamente pentagonal. ¡ah! ¿un tamarindo? Perdón. Es que tamarindos en España ....

Decido desquitarme de tanta sofisticación con los postres. Ahí no podrán engañarme. Un postre es un postre: pera, ciruela, helado ..... ¡incorrecto!! ¿qué es el dúo cremoso de vainilla y tarta sacher? ¿y la selección guanaja e ivore sobre salsa de la pasión? ¿savarín al curry? Opto por la Mousse de Pistacho dos texturas. Sé lo que es la Mousse, sé lo que son los pistachos ... y seguro que las texturas se dejan comer.

Creo que el camarero se ha enfadado cuando le he dicho que nada de finas hierbas. Que paga la empresa y que me ponga las más gordas.....


10 comentarios:

Lola Steiner dijo...

Te vamos a llevar a un restaurante que está al lado de la casa de Colette, donde el menú se entiende de maravilla y los camareros te llaman "reina" a la mínima de cambio. Y un cocido... grrrrrr!

Fidelio dijo...

Muchas gracais lol, creo que necesito algo así .... (¿a mi no creo que me llamen reina, no?)

Colette dijo...

Pues te llamarán rey....no te preocupes. Y si te descuidas te dan un abrazo, no te preocupes, que son re-majos.

Ayer estuve a puntito de pecar, pero como el platillo en cuestión costaba 70 € nada menos y, sobretodo, una tiene sus principios, no caí en la tentación de catar el: OSO!!!! Estos rusos no tienen escrúpulos...

Lo que estoy pagando por alimentarme en este puñetero país no lo sabe nadie!!!!

No sé si el bisnieto de Ibsen se encarga del agua con gas, pero desde luego el primo hermano del Capitán Ahab es el que pesca aquí para los restaurantes. Y creo que los mata a disgustos, para que la carne del pez no se estropee...de ahí su precio.

Anónimo dijo...

Fidelio, ya que están recomendando restaurantes, para tomar comida BUENA te recomendaría un asturiano, aunque a mí personalmente me cautiva lo árabe, sobre todo los que te ofrecen una espectacular danza árabe. Claro, que la digestión, no sé cómo acabarías haciéndola después de verla ¿se te podría llegar a cortar...? ¡Seguro que no!! Ü

Fidelio dijo...

Colette, ¡¡¡ claro que sí !!! Ya va siendo hora de que todos esos emparedados robados por Yogui a los incautos turistas del parque Yellowstone sean vengados. Haz como con el pollo asado: quítale la piel .... pero te la traes a España que verás que alfombra .....

Lady of Shallot, a mi la comida árabe me gusta. Pero puestos a ser malo, si de cualquier menú de cocina árabe quitas los dátiles, el cilantro, la miel y el sésamo ...... ¡nos queda el menú del día de cualquier restaurante de polígono industrial! Mi digestión se resentiría menos contemplando una danza del vientre que practicándola yo mismo ... de eso estoy seguro....

Connie dijo...

Buenas fidelio. Antes que nada, felicitarte por tu Blog, me parece genial.

Yo he comido varias veces en restaurantes de ese tipo, por cierto, la última vez, me quise hacer la lista, dije de invitar, y me costó la broma 350€ (¡¡para dos personas!!) ahora bien....¡¡YO ME TRAJE LA MALDITA BOTELLA DE RECUERDO, QUE NARICES!! Se llama VOSS, botella de cristal, alta, tipo frasco de colonia como tu dices, y entre cada letra grande, con letra mas pequeña se puede leer : "artesian water from norway" que monada! Le queria hacer una foto, pero no tengo ni idea de como colgarla en el blog, jaja. Ya la verás cuando vengas a comer a casa!! Besitos.

Fidelio dijo...

¡Connie, que alegría, gracias por venir! Siiiiii, ¡¡esa era la puta botella !!

Yo, fíjate que soy cutre, tengo por casa un de La Casera de las antiguas, de esas que se abren haciendo presión sobre una especie de alambre.

¡¡¡ 350 euros uno cena para dos !!!
Dime que por lo menos mereció la pena (el colega, no la cena)

Anónimo dijo...

Espero que la cena no nos desequilibre el presupuesto del año, algunos tenemos que seguir comiendo con cargo al mismo...

Fidelio dijo...

inmouchar: Si te refieres al prespuesto que sufragó mi cena ... tranquilo .... que en realidad solo imputé los 30 euros de dietas (nunca se sabe si es tal inmouchar puede ser una auditor interno ...).

Si te refieres a presupuesto de cenas de Connie ¡¡ qué morro, chaval !! Así que a estirarte y la próxima te toca a tí (y Connie será inteligente y aunque solo sea por hacer gasto, pedirá el mejor vino).

Anónimo dijo...

Fidelio, me ha gustado el dibujo de tu hijo y me ha invitado a hacer un comentario a tu relato. La otra ilustración, que pusiste, más que nada me daba "agobio". Una representación tan excesivamente ostentosa del lujo de la comida. Imagino, que precisamente era lo que querías reflejar, pero solo de ver la foto, ¡me echaba para atrás!
Me da la vena ONG y pienso ¡Dios mío, qué derroche! pero lo peor casi es, que encima el fin, que realmente se persiga en dichos restaurantes, el cual se supone que es atraer con esa comida, es lo que precisamente no se consiga. Es decir, que guste al comensal.