La he llamado, en un ejercicio de originalidad sin precedentes "Cielo porteño, frente al edificio Kavanagh, vaya mierda el cablecito". Es Buenos Aires, es el edificio Kavanagh, y hay que joderse con el cablecito.
Espera espera, ahora me voy a tirar el moco como la peña que sabe mazo de fotografía: Estuve 5 horas esperando justo justo justo esa luz del atardecer porteño. Ya estaba hasta el mismísimo obturador pero la espera mereció la pena y pude estrenar no ya mi Canon-500 S, sino mi flamante objetivo Sigma¨70-300 APO DG.
5 comentarios:
Me encanta la afoto uno. Y en esta sí que es una putada cable, sí!
Muchísimas gracias aicirt. Me alegro que te guste. Pura suerte, porque no me llamó Dios por los caminos de la fotografía ....
Yo creo que con el photoshop se arregla en un plis. Pero no se usarlo, lo siento. Mademoiselle Duncan es una fiera con ese programa, comentale...
Porque la foto mola mazo, pero el cable... ¡ay!
pues ha nosotras hel cavle aora nos da pena, todos ai metiendoos con hel i eso. ademas, que lo umaniza. hes como la peca de sindicraufor.
pero que si quieres quitarlo, nos hofrezemos para darle una pasada de potochop. lla nos dizes!!
vesisssss
Muchas gracias Ruvis, pero tenéis toda la razón del mundo. Ese cable, como diría Gila, tiene madre. Además, como decía el plasta de Paulo Coelho, nada sucede por casualidad. Así que el cable untouchable, como el quebincosner.
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